Perro de agua español

El perro de agua español tiene como predecesor al antiguo perro barbet, el perro de agua que ha dado paso a otras razas como el caniche o poodle y las distintas razas de perros de agua (español, portugués, francés o romagna entre otros). Su presencia en la Península Ibérica se remonta, por lo menos, al año 1100 a.C. pero se desconoce exactamente cuál es el origen exacto y si existieron otras razas en su desarrollo. Durante el siglo XVIII el perro de agua español era utilizado para trabajar en actividades como el pastoreo y la caza, como la mayoría de las razas que aparecieron en esa época. Debido a su habilidad para nadar, los pescadores del norte español lo usaban ocasionalmente como ayudante. Su población principalmente se encontraba en Andalucía y era conocido como «El perro Turco».

Más adelante y con la aparición de otras razas en el país, el perro de agua español dejó de ser el principal ayudante en las labores de pastoreo y caza, lo que hizo que le numero de ejemplares disminuyera notablemente. Principalmente fueron sustituidos por razas como el pastor alemán y el pastor belga malinois.

Hoy en día, el perro de agua español sigue siendo un perro popular y conocido pero sus labores han ido cambiando, siendo actualmente uno de los perros deportistas en España más populares.

El perro de agua es muy parecido físicamente al actual Barbet francés por su origen común. Se trata de un perro de tamaño medio,como te adelantamos al principio,  rústico y de complexión atlética, muy musculado. La cabeza es fuerte, elegante y con el techo craneal aplanado. La depresión naso-frontal es suave y poco profunda. Los ojos, sonligeramente oblicuos, y van desde el color avellana hasta el castaño. Las orejas son de inserción media, triangulares y caídas.

El cuerpo es mediano, robusto y ligeramente más largo que alto aunque hablamos de un perro bastante proporcionado. La espalda es recta y fuerte, mientras que la grupa se inclina suavemente con respecto a la horizontal. El pecho es ancho y profundo. El vientre es ligeramente recogido.

Los machos suelen medir entre cuarenta y cuatro y cincuenta centímetros, mientras que las hembras son algo mas bajas, midiendo entre cuarenta y cuarenta y seis centímetros a la cruz. En cuanto al peso, también hay diferencias entre ambos sexos, los machos suelen pesar entre dieciocho y veintidós kilogramos, mientras que las hembras pesan por lo general entre catorce y dieciocho kilogramos.

La cola de este perro es de inserción media y, el estándar FCI de la raza indica que debe ser amputada entre la segunda y la cuarta vértebra, practica que en muchos lugares del mundo es prohibida y que aun no se entiende porque en esta raza se sigue haciendo. Hoy en día, la FCI acepta perros de todas las razas con colas enteras, aún cuando sus estándares indiquen que las colas deben ir amputadas.

El pelaje del perro de agua español es largo, rizado y lanoso. Los rizos se muestran desde el nacimiento. Por otro lado, es importante resaltar que aunque existen perros de agua españoles tricolores, negro y fuego o avellana y fuego, los aceptados por la FCI son los unicolores, ya sea en blanco, en negro o en marrón, y los bicolores que sean blanco y negro o blanco y marrón.

El perro de agua español, tiene un carácter sumamente obediente y con una predisposición natural para el aprendizaje. Eso se debe, en parte, a su inteligencia, la cual es importante estimular de forma regular con adiestramiento, habilidades caninas y otras actividades que consideremos apropiadas, tanto físicas como mentales desde los primeros meses de vida.

Estos son perros muy fieles y apegados a sus dueños, valientes y con un carácter muy equilibrado. De forma general suelen mostrar instintos cazadores y de pastoreo, una herencia de las actividades que ha desarrollado durante generaciones.

Uno de los aspectos que necesitan mayor cuidado en los perros de esta raza es el pelaje, ya que debido a sus rulos son muy comunes los enredos y la acumulación de suciedad. Por lo general, se recomienda dejar un largo de entre 3 y 12 centímetros, no obstante, el pelaje debe ser cepillado prácticamente todos los días si se desea mantener un aspecto bonito y sin marañas.

Otro aspecto a destacar es el ejercicio físico que requiere esta raza. Son perros sumamente activos que necesitará un mínimo de entre dos y tres paseos diarios, combinados con juegos (pelota, frisbee o running) y actividades de estimulación mental (habilidades caninas y obediencia, principalmente). Una actividad que combina ambos aspectos mencionados es el agility, un deporte muy completo y recomendable para esta raza.

Principalmente debido a su carácter apegado y fiel, el perro de agua español necesitará iniciarse de forma pronta en la socialización, es decir, el proceso en el que se aprenderá a relacionarse con distintas personas, animales y entornos. Este proceso dura toda la vida y es indispensable para evitar miedos y reacciones indeseadas en su etapa adulta. Mediante la socialización, el perro aprende a relacionarse, entendiendo además las «normas» de comunicación humanas, felinas y de los perros.

El perro de agua español se considera uno de los más sanos que existen y no tiene tendencia a sufrir problemas hereditarios, no obstante y como ocurre con todos los perros, las enfermedades más habituales registradas son:

• Cataratas: es uno de los problemas de salud caninos más habituales. Consiste en la opacificación del cristalino y los síntomas son los mismos que padecen los seres humanos.
• Displasia folicular: crecimiento anormal del folículo piloso, que en lugar de crecer hacia afuera crece hacia adentro, provocando dolor y malestar en el perro, al margen de posibles infecciones como pústulas y pápulas. Afecta principalmente a los perros de color negro.
• Distiquiasis: se trata de un crecimiento anormal de las pestañas, principalmente en el borde palpebral.