Actualizado febrero 8, 2019
Ante todo se debe tener en cuenta que el maullido es para los gatos, como la palabra al hombre, en tanto es una de sus formas de comunicación, ya sea con sus dueños, con su entorno o con otros felinos. Sin embargo, cuando el maullido se torna constante y excesivo, probablemente esté significando otra cosa.
En los primeros meses de vida, el maullido es en los gatos su forma de comunicación por excelencia, pero a medida que éstos van creciendo, otros sonidos vienen a acompañar al maullido para comunicarse, como los silbidos o gruñidos.
En este sentido, en los gatos pequeños, el maullido puede ser un llamado para cubrir sus necesidades básicas, como el hambre, el frío, etc. Esto generalmente se da cuando en el período de adaptación del gato al hogar, cuando extraña la protección, el calor y la compañía de su madre.
Respecto de los gatos grandes, se debe tener en cuenta que algunas razas maúllan más que otras. Sin embargo, hay distintas situaciones donde los maullidos toman un significado distintivo.
El celo es la principal causa por la que los gatos maúllan, sobre todo cuando éstos no están esterilizados. También el maullido puede estar motivado por el estrés y la tensión, o como un llamado de atención para que juguemos con ellos.